La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha publicado un informe actualizado sobre el desastre ambiental causado por Grupo México en el río Sonora hace diez años.
Este suceso continúa siendo un punto focal de atención debido a las implicaciones ambientales y legales que persisten. El incidente, que no fue un simple accidente sino el resultado de negligencia en el diseño de la presa resultó en la liberación de sustancias tóxicas al río.
Pese a los esfuerzos de remediación, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha enfatizado que el caso permanece abierto, sin “carpetazo”, y que se buscará una solución integral al daño causado.
En la administración anterior, se tomó la decisión de disolver el fideicomiso encargado de la remediación, una acción respaldada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y Semarnat. Sin embargo, en 2020, la Suprema Corte de Justicia de la Nación dictaminó que este proceso violó el derecho a la información y consulta de las comunidades afectadas.
REPARACIÓN DEL DAÑO
A pesar de la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Grupo México ha implementado tácticas dilatorias para evadir su responsabilidad ambiental. En el pasado, se firmó un acuerdo entre Profepa y Grupo México para remediar los daños, pero la ejecución ha sido cuestionada.
El fideicomiso río Sonora reportó un manejo de 1,232 millones de pesos, con 309 millones pagados externamente. De estos fondos, 7.8 millones se distribuyeron directamente a los afectados por problemas de salud.
El informe de Semarnat subraya la importancia de continuar con la vigilancia y las acciones legales para asegurar una remediación completa y justa para las comunidades y el medio ambiente afectados por el desastre de Grupo México.
