El Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia ha confirmado la sentencia de 10 años de prisión para la expresidenta transitoria Jeanine Áñez por la manera en que asumió la Presidencia interina en 2019, según la defensa de la expresidenta, que anunció la decisión este viernes.
El abogado Luis Guillén, uno de los defensores de Áñez, informó que “la sentencia contra la exmandataria ha sido confirmada por el Tribunal Supremo de Justicia”.
Añadió que, aunque esta era la última instancia dentro del ordenamiento jurídico interno para anular la condena, aún existen “diferentes recursos que se pueden interponer, como una revisión extraordinaria de sentencia y amparos contra la misma resolución”.
Guillén indicó que el equipo jurídico evaluará las opciones disponibles para continuar la defensa de la expresidenta, sugiriendo que recurrir a la vía internacional podría ser lo más pertinente.
La defensa de Áñez sostuvo que ella accedió a la Presidencia como segunda vicepresidenta del Senado debido al vacío de poder tras la renuncia de Evo Morales, su vicepresidente y los líderes del Senado y la Cámara de Diputados.
Actualmente, Áñez se encuentra detenida preventivamente en La Paz desde marzo de 2021 acusada de delitos de terrorismo, sedición y conspiración también relacionados con la crisis de 2019.
La expresidenta enfrenta al menos otros siete procesos judiciales.
Mientras el gobierno sostiene que en 2019 hubo un golpe de estado contra Evo Morales, la oposición argumenta que las protestas que llevaron a su renuncia se debieron a un fraude electoral en su favor en los comicios anulados de ese año.
Guillén destacó que el auto supremo del TSJ “llama la atención” porque no aborda varios elementos, como el vacío de poder en el momento en que Áñez asumió la Presidencia. El abogado argumentó que la sentencia vulnera los derechos y no se ajusta a los lineamientos jurídicos.