Estados Unidos rechazó la solicitud de México para un estudio científico conjunto sobre los efectos en la salud con el maíz genéticamente modificado, lo que sugiere que los dos socios podrían estar acercándose a una disputa comercial formal, dijo el viceministro de Agricultura de México, Víctor Suárez.
México ha pedido reiteradamente a Estados Unidos que coopere en la investigación científica sobre el tema en una disputa por las restricciones al uso de maíz transgénico, compra alrededor de 5.000 millones de dólares al año en maíz transgénico, sobre todo de grano amarillo para alimentar ganado.
Sin embargo, Víctor Suárez dijo a Reuters en una entrevista el miércoles por la tarde que Estados Unidos rechazó la solicitud y dejó en claro que no participaría en nuevas investigaciones científicas con México.
Suárez dijo que los dos países discutieron la solicitud de México durante una visita del secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, y durante conversaciones en Washington.
“No quisieron poner un periodo en que las dos partes se pusieran de acuerdo para hacer estudios de impacto a la salud animal y a la salud humana”, declaró Suárez durante la entrevista en su oficina en Ciudad de México.
Con información de El Sol de México