El reciente ataque a Diana Sánchez Barrios, una reconocida lideresa de comerciantes en la Ciudad de México ha generado una respuesta inmediata y contundente por parte del gobierno local.
La jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, ha anunciado un plan integral para reforzar la seguridad en el Centro Histórico, una de las zonas más emblemáticas y concurridas de la capital, que icluye el despliegue de más de 400 policías adicionales, quienes se sumarán a las fuerzas ya existentes para aumentar la presencia y vigilancia en las calles.
Además la creación de un nuevo sector policiaco con mando único permitirá una coordinación más efectiva y rápida de las fuerzas de seguridad, mejorando la capacidad de respuesta ante cualquier incidente.
Asimismo, se llevará a cabo un diagnóstico exhaustivo del sistema de videovigilancia. Este análisis permitirá identificar las áreas que requieren nuevas cámaras de seguridad y modernizar el equipo existente, asegurando una cobertura más amplia y efectiva. La tecnología jugará un papel crucial en este reforzamiento, proporcionando herramientas avanzadas para la prevención y resolución de delitos.
El plan también aborda el reordenamiento del comercio ambulante, una medida necesaria para reducir la congestión y mejorar la seguridad en las calles. La lucha contra la extorsión es otro pilar fundamental de esta estrategia, ya que este delito afecta gravemente tanto a comerciantes como a residentes. La colaboración con el sector económico será esencial para implementar estas medidas de manera efectiva y sostenible.
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— Clara Brugada Molina (@ClaraBrugadaM) October 18, 2024
COMPROMISO CON LA SEGURIDAD
La respuesta del gobierno de la CDMX refleja un compromiso firme con la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos. Estas acciones no solo buscan prevenir futuros ataques, sino también crear un entorno más seguro y ordenado para todos. La participación de la comunidad y la cooperación entre las autoridades y los ciudadanos serán clave para el éxito de este plan.
El ataque a Diana Sánchez Barrios ha sido un llamado de atención sobre la necesidad de reforzar la seguridad en la ciudad. Con estas medidas, el gobierno de la CDMX espera no solo proteger a sus ciudadanos, sino también enviar un mensaje claro de que la violencia y la delincuencia no serán toleradas. La seguridad es una prioridad y se están tomando todas las acciones necesarias para garantizarla.