Alfredo Ramírez, actual gobernador de Michoacán, abrió a medios de comunicación las puertas del área exclusiva de la casa de Gobierno, en Morelia, para mostrar el búnker que utilizó durante los últimos cinco años Silvano Aureoles.
El exgobernador entre 2011 y 2021, vivía en un búnker habilitado con muros y ventanas con blindaje antibalas, así como un pasadizo secreto a manera de ruta de escape.
Dicha residencia fue edificada en 1988 y en ella han habitado con sus familias y despachado un total de diez exgobernadores, de los cuales siete forman parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y tres del Partido de la Revolución Democrática (PRD), éste último, al que pertenece Silvano Aureoles.
La habitación que ocupó el exgobernador es conocida como “El Búnker”, al tener blindaje en sus paredes, techo y ventanales, a diferencia de las otras siete que integran el inmueble.
Asimismo, tres cuartos estaban destinados para la servidumbre que atendía a los mandatarios las 24 horas del día.
Así es el búnker donde vivía Silvano Aureoles
“El Búnker” se compone por tres piezas o secciones, con una superficie de aproximadamente 120 metros cuadrados, cuyo acceso es a través de una puerta de madera seguida por otra totalmente blindada.
En la primera sección se encuentra el área para la sala y el dormitorio del gobernador, divididas únicamente por un muro de piedra.
Frente al espacio que ocuparía la cama del mandatario, se ubica un mueble de madera que asemeja ser el soporte de una pantalla de televisión.
Dicho mueble cuenta con un mecanismo electrónico que lo desplaza sobre el piso al menos un metro, para abrir un pasadizo secreto a manera de ruta de escape, y cuya salida está protegida con otra puerta blindada, cercana a una cancha de baloncesto y un pasillo que da a los helipuertos oficiales.
La segunda sección de “El Búnker” consta de un espacio de 15 metros cuadrados, con armarios de madera y cristal, totalmente iluminados, así como dos cajoneras para guardar relojes o joyas.
La tercera pieza es de 25 metros cuadrados donde se habilitó un spa que incluye dos baños sauna, un jacuzzi, dos duchas y sanitario.
Silvano Aureoles vivía con sus dos hijas y tres perros, aunque en algunas ocasiones tenía la compañía de su madre o hermanos.
Con información de El Universal