Durante la 132 Asamblea General Extraordinaria del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), tanto la representación obrera como la patronal manifestaron su rechazo ante la propuesta del nuevo gobierno federal de que dicho organismo constituya una empresa constructora estatal.
Esta iniciativa, defendida por el director del instituto, Octavio Romero Oropeza, tiene como objetivo construir un millón de viviendas, beneficiando principalmente a jefas de familia, jóvenes y adultos mayores.
Romero Oropeza argumentó que la creación de una constructora estatal permitiría reducir costos mediante la compra consolidada de materiales y servicios, generando además empleos directos e indirectos en todo el país.
Asimismo, señaló que esta medida garantizaría el acceso a una vivienda digna y social, en el marco del Programa Nacional de Vivienda y Regularización.
En su mensaje durante la Asamblea General Extraordinaria 132, nuestro director general, @OctavioRomero_O, estableció que una premisa de su administración será que todos los temas relevantes del Instituto se dialoguen con los sectores en un ambiente transparente y de coordinación… pic.twitter.com/9V01TOtFDx
— Infonavit (@Infonavit) October 18, 2024
ESTÁN EN DESACUERDO CON LA REFORMA QUE FACULTA AL INFONAVIT
No obstante, el sector obrero y patronal mostró su desacuerdo con la reforma constitucional propuesta que otorgaría al Infonavit facultades para construir viviendas directamente.
José Medina Mora, presidente de la Coparmex, coincidió en que el modelo de la constructora estatal representa un retroceso, sugiriendo que se aprovechen las capacidades del tripartismo para fortalecer la competitividad del sector especializado.
Luis Alberto Moreno Gómez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (Canadevi), advirtió que la conformación de una empresa constructora de este tipo requeriría entre 18 y 24 meses, así como una estructura organizacional de hasta 12 mil personas.
A pesar de la coincidencia en la necesidad de construir un millón de viviendas, la propuesta de crear una constructora estatal ha generado un debate en torno a su viabilidad y los posibles efectos sobre el sector de la vivienda en México.
