Este lunes, el presidente Donald Trump ordenó el envío de 2 000 elementos adicionales de la Guardia Nacional a Los Ángeles para reforzar las operaciones del ICE (Servicio de Control de Inmigración y Aduanas), según informó el portavoz del Pentágono, Sean Parnell.
Esta medida forma parte de una escalada en la respuesta federal a las protestas generadas por redadas antiinmigrantes.
At the order of the President, the Department of Defense is mobilizing an additional 2,000 California National Guard to be called into federal service to support ICE & to enable federal law-enforcement officers to safely conduct their duties.
— Sean Parnell (@SeanParnellATSD) June 10, 2025
¿Qué propuso Trump?
Las manifestaciones comenzaron el 6 de junio, cuando agentes del ICE llevaron a cabo detenciones de inmigrantes, desencadenando marchas y enfrentamientos con la policía. En ocasiones, se registraron saqueos, incendios de vehículos y uso de balas de goma y gases lacrimógenos como medidas de control. En semanas recientes, también se desplegaron 700 marinos en apoyo a estas operaciones federales, lo que ha aumentado significativamente la presencia militar en la ciudad.
El gobernador Gavin Newsom calificó la decisión de Trump como “demente” y “dictatorial”, criticando que envió tropas sin coordinación con las autoridades estatales. Además, denunció que muchos soldados estaban “sentados sin servir” y se prepara para interponer una demanda por esta supuesta violación de la soberanía estatal. Asimismo, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, expresó su indignación y defendió el derecho de la ciudad a gestionar sus propias crisis internas.
🚨🇺🇸💥Se enfrentaron manifestantes y la #GuardiaNacional en #LosAngeles después de que los soldados llegaron a la ciudad por orden del presidente Donald #Trump para realizar redadas con #migrantes #indocumentados. #EstadosUnidos
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— Agenda Setting Press (@agendasetting1) June 9, 2025
La situación empeora
Este despliegue se enmarca en un contexto de alto debate político y legal, pues la federalización de la Guardia Nacional sin el consentimiento estatal no se registraba desde las marchas por los derechos civiles de 1965. Varios expertos advierten que el uso de fuerza militar en el contexto de protestas sociales plantea riesgos significativos para las libertades civiles y la relación entre el gobierno federal y los estados.
Mientras tanto, las protestas continúan, con decenas de arrestos, y aumentan la atención y el apoyo internacional,incluida la protesta diplomática de México, así como manifestaciones en otras ciudades como Boston, Nueva York y Chicago, La situación de Los Ángeles sigue en pie como epicentro de un pulso nacional sobre migración, federalismo y control civil de las fuerzas armadas.