Claudia Sheinbaum, virtual presidenta electa de México que asumirá el cargo el 1 de octubre, afirmó que la reforma al Poder Judicial será decidida por el Congreso y que está abierta al diálogo.
Esto, tras las manifestaciones de magistrados en los Tribunales de Ciudad de México, quienes rechazaron la propuesta de elegir jueces, magistrados y ministros mediante voto popular, uno de los puntos centrales de la controvertida reforma.
Los magistrados expresaron su intención de reunirse con Sheinbaum para comunicarle sus desacuerdos, afirmando que no permitirán una reforma que “destruya” al Poder Judicial.
Sheinbaum, al salir de una jornada de trabajo en su sede de transición en el oriente de la capital, declaró a los medios: “Siempre estamos abiertos al diálogo.
Por eso se está abriendo en el Congreso un espacio de discusión y propuestas, porque es ahí donde se va a decidir; nosotros ya manifestamos nuestra opinión”.
La semana anterior, Sheinbaum aseguró al sector privado que la reforma judicial “de ninguna forma representará autoritarismo ni una concentración del poder. Ese no es el objetivo”.
Tras el triunfo del oficialismo en las elecciones del 2 de junio, que le otorgó una ‘supermayoría’ en el Congreso a partir del 1 de septiembre, los mercados reaccionaron con preocupación ante la posibilidad de que el partido gobernante, Morena, y sus aliados pudieran reformar la Constitución sin necesidad de negociar con la oposición.
No obstante, Sheinbaum argumentó que la reforma para elegir por voto popular a los miembros del Poder Judicial otorgará mayor autonomía a jueces, magistrados y ministros en el país.
El Congreso mexicano ha programado una serie de ejercicios de ‘Parlamento abierto’ para discutir la reforma judicial y otros cambios legales que el oficialismo pretende aprobar a partir del 1 de septiembre, cuando se conforme la nueva legislatura federal, un mes antes de que Sheinbaum asuma el cargo el 1 de octubre.