Senadores eligen sede alterna para discutir la Reforma Judicial

Debido al bloqueo en la Cámara Alta, los senadores trasladarán la discusión sobre la Reforma Judicial a la antigua sede del Senado, en la casona de Xicoténcatl.

La decisión de llevar el debate a este lugar fue tomada tras las protestas realizadas por jueces y empleados del Poder Judicial, quienes se oponen a la aprobación de la reforma, prevista para la próxima semana.

El presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, explicó que la medida se adoptó ante la «imposibilidad material de llevar a cabo la sesión en la sede principal».

Desde temprano, jueces y trabajadores judiciales, quienes llevan más de tres semanas en huelga, se congregaron en el Senado para bloquear la aprobación de la polémica reforma, la cual propone que los jueces sean electos por voto popular. 

Esta reforma fue avalada el miércoles por la Cámara de Diputados.

En respuesta, Fernández Noroña convocó a una sesión en la antigua casona de Xicoténcatl, ubicada en el centro de la Ciudad de México, una hora antes de lo programado.

Durante la sesión de este jueves, prevista para las 11:00 horas y que Fernández Noroña calificó como «sencilla», se abordarán 94 temas, entre ellos el anuncio oficial de la recepción del dictamen sobre la Reforma Judicial, aprobado por la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados.

«Tenemos una sesión sencilla hoy y la vamos a realizar. Recibí la facultad para convocar en una sede alterna si había dificultades materiales, y este es el caso», dijo el presidente del Senado en un video difundido en redes sociales.

El Senado aprobó desde el martes varios acuerdos que permiten cambiar la sede de sus sesiones, con el objetivo de avanzar en el proceso de aprobación de la reforma. 

Se espera que el dictamen sea aprobado en comisiones el próximo domingo y en el pleno el miércoles siguiente.

 

 

Fernández Noroña, no obstante, afirmó que «se respeta el derecho de manifestación», aunque no se compartan los motivos de la protesta.

 

El senador también señaló que «no hay poder en la tierra que pueda detener nuestro proceso legislativo» en relación con la reforma judicial.

 

El nuevo periodo de sesiones en el Senado comenzó el domingo, con 85 de los 128 escaños en manos de la alianza oficialista de tres partidos. 

 

Esto les permitiría alcanzar, con solo un voto más, la mayoría calificada de dos tercios necesaria para modificar la Constitución.

 

Mientras se desarrollaba la protesta en el Senado, el presidente Andrés Manuel López Obrador, principal impulsor de la reforma, afirmó que existe «mucha desinformación» entre los trabajadores del Poder Judicial y estudiantes que se oponen a su propuesta de reforma.