El sector agrícola mexicano enfrenta una transformación significativa, marcada por la disminución de su fuerza laboral, evidenciando un cambio radical en la economía y la soberanía alimentaria del país.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), informo que, en el último año, el número de trabajadores en agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca ha disminuido en 192,419, dejando al sector con la menor proporción de empleados desde que se tienen registros comparables, al primer trimestre de 2024, solo 10.8% de la fuerza laboral en México se dedica a actividades primarias, sumando un total de 6,367,745 personas.
Este declive refleja un cambio profundo en la política económica del país, iniciado a finales de los años 80 y principios de los 90 con la implementación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El TLCAN marcó el paso de un modelo económico nacionalista a uno de ventajas comparativas, lo que resultó en una dependencia de las importaciones de alimentos y un rezago en el aparato productivo del sector.
México, tradicionalmente autosuficiente en alimentos, ahora importa granos básicos y se enfoca en la producción de hortalizas y bayas para la exportación, alterando así el patrón de consumo nacional.
Menos del 13% de los trabajadores del sector están registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo que subraya la brecha en el acceso a derechos laborales. Además, la pérdida de la soberanía alimentaria ha llevado a una disminución en la reinversión en el sector agropecuario y ha contribuido a la migración de trabajadores hacia otros países.
ES URGENTE UN PLAN DE ACCIÓN PARA BUSCAR MANO DE OBRA
El Consejo Nacional Agropecuario ha propuesto la creación de un Programa Bracero para trabajadores de Centroamérica, en respuesta a la escasez de mano de obra que México enfrenta actualmente, la más grave en décadas aseguró Aldo Mares Benavides, productor hortícola de Jalisco.
Asimismo, aseguró que, para cubrir el déficit que hay de trabajadores en el sector, es necesario hacerlo más atractivo y para ello se propone un marco jurídico para regular a los reclutadores; dar seguridad social, salud y sistemas de cuidados.