En México, el 50% de la población tiene acceso a solo el 9.2% de la riqueza del país. Esta alarmante estadística revela que una gran proporción de mexicanos no sólo carece de recursos, sino que también está endeudada.
Así lo afirmó Juan Manuel Martínez Louvier, director general del Instituto Nacional de la Economía Social (Inaes). Además de la falta de recursos, estos individuos enfrentan otro desafío significativo: las empresas financieras que podrían ayudarles a superar sus problemas económicos a menudo buscan maximizar sus propias ganancias, incluso si eso significa sacar recursos del país.
El 50% de la población mexicana accede a solo el 9.2% del ingreso total. Este dato es escalofriante, especialmente considerando que México tiene una de las economías más prósperas del mundo, precisó Martínez Louvier.
Cuando estas personas van a un supermercado, a una farmacia, gastan en un médico, después encuentran servicios financieros que son carísimos. Entonces, la mitad de los mexicanos no sólo no tienen, sino que deben, afirmó.
Durante su participación en la Jornada Nacional de las Cooperativas en México, Martínez Louvier enfatizó que el gobierno federal debe buscar formas de erradicar la pobreza y la deuda en la población del país. Las opciones disponibles en el mercado, en su mayoría extranjeras, a menudo sólo buscan generar recursos.
Debemos sacar a la mitad de la población que no sólo no tiene, debe. Este fenómeno ocurre porque quien se encuentra enfrente de la resolución de sus necesidades son empresas de capital con ánimo de maximización de ganancias, hiperconcentración y en muchos casos, exportación del dinero a otros espacios, que ya ni siquiera son países, son bolsas de valores, fondos de inversión, etcétera. Se deshumaniza la actividad económica porque el modelo empresarial vigente mayoritario sigue siendo uno que prefiere las cosas por encima de las personas, expuso el director del Inaes.
A pesar de estos desafíos, hay esperanza. Durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, se han implementado una serie de acciones que han ayudado a más de 5 millones de personas a salir de la pobreza y la miseria. Al mismo tiempo, se ha obligado a grandes consorcios a pagar los impuestos que debían.
