Este mes, México preside ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas, por ello, Marcelo Ebrard, encabezó un debate sobre el tráfico de armas.
De igual forma, el canciller mexicano hizo un llamado a combatir este fenómeno y reforzar compromisos, buscando la cooperación del sector privado.
En el debate “Impacto del desvío y tráfico de armas para la paz y la seguridad”, Marcelo Ebrard advirtió que “el tráfico ilícito y desvío de armas pequeñas y ligeras es una amenaza a la paz y seguridad internacionales” que afecta gravemente a la sociedad civil.
Aseguró que se trata de un “fenómeno global que afecta gravemente a la población civil, propicia la violencia, genera desplazamientos de personas que desean escapar de contextos de seguridad”.
El canciller mexicano reconoció que Naciones Unidas ha hecho muchos esfuerzos en el tema del control de armas, sin embargo, advirtió que “son insuficientes”.
Mencionó un elemento que, considera México, aún está faltando: la participación del sector privado.
“Los actores privados deben contribuir con acciones de regulación a fin de frenar el desvío de armas que comercializan para asegurarse que las armas no lleguen a manos criminales”, dijo.
Como ejemplo, mencionó que cada día alrededor de 500 personas pierden la vida y 2 mil quedan heridas por disparos de armas de fuego en el mundo.
En el caso de Latinoamérica, alertó, las cifras de muertos o heridos por armas de fuego son mayores que en zonas de conflicto armado.
El tráfico de armas, enfatizó, tiene también un “impacto desproporcionado” en las mujeres, niños y niñas.
Finalmente, Marcelo Ebrard llamó a reconocer “las repercusiones de género derivadas del desvío y tráfico de estas armas, incluyendo violencia sexual”.