Frente a las definiciones finales en cargos de elección entre Morena y sus aliados en Hidalgo, Karen Quintero declaró, muy segura, que será diputada por la vía plurinominal al ser considerada en el segundo lugar de las listas, amparada en la acción afirmativa de la Diversidad Sexual, representando al Partido Verde.
Un aspecto que llama la atención es que ya comenta a sus cercanos la presidenta de la Organización Transgénero en el Estado, porque formalmente siempre ha marcado su distancia de los partidos políticos; recordemos que apenas el pasado 27 de enero, declaró a los medios no tener interés en participar por ningún cargo político en las elecciones de junio próximo, pues su labor se circunscribía al activismo en pro de la diversidad sexual.
Recordemos que en 2020, María Karen Quintero Jiménez, buscó competir por una regiduría en el municipio de Pachuca, por Morena. No logró su objetivo pero se inscribió, a pesar de aceptar no estar afiliada a este partido político.
Y en efecto, la activista transgénero no es parte de Morena y en enero pasado cuando se descartó de alguna aspiración política, declaró que su organización no permitiría ni apoyaría que pseudoactivistas de la Ciudad de México, pusiera a sus candidatos de la diversidad sexual en la entidad.
Hasta este momento, Quintero era congruente, pero lo que ahora viene comentando, lleva a los hidalguenses y a los miembros de la comunidad LGBTIQ+, a preguntarse: ¿Qué o quién le hizo cambiar de opinión?
Es aquí donde en el terreno de los trascendidos se vuelve un campo fangoso para las verdaderas convicciones en favor de la comunidad transgénero y la diversidad sexual, pues se tienen sospechas con completas bases sólidas que detrás de este repentino cambio en las aspiraciones políticas de María Karen, está la mano del cuestionado y chapulinesco, Cuauhtémoc Ochoa.
Ochoa hace años fue el dueño absoluto de la franquicia del Tucán en Hidalgo y no ha podido explicar su inocencia en el caso de corrupción cometido en Pemex, siendo Director de la Empresa Productiva del Estado el indiciado, Emilio Lozoya, y él miembro del Consejo de Administración que le autorizó todas sus rapacerías y corrupciones, ahora vuelve a las andadas.
CUAUHTÉMOC OCHOA ENTRA AL JUEGO
Si Quintero Jiménez está siendo impulsada por el ahora improvisado “activista” de la diversidad sexual en Hidalgo, o sea Cuauhtémoc Ochoa, tal candidatura estaría torcida desde su origen porque el conocido chapucero nunca ofrece o da nada, gratis. Estaría usando la acción afirmativa de la diversidad sexual con fines ajenos a la verdadera y legítima lucha de este sector social, para ubicar sin consenso alguno, a una dirigente de la comunidad transgénero, más que como un proyecto loable, como una aliada que coincide con sus intereses personales.
Hasta donde se sabe, no se ha consultado a la comunidad de la diversidad sexual en Hidalgo sobre el asunto, lo que además tendría todos los signos de una imposición, a fin de una absoluta contradicción y distorsión al activismo que ha pregonado y defendido Karen Quintero.
Sería triste para su comunidad enterarse que detrás de su hipotética diputación se esconden los fines perversos y torcidos de un político de la baja catadura, como lo es Cuauhtémoc Ochoa.