La inflación en México durante 2024 refleja una tendencia estable, evidenciando la eficacia de las políticas gubernamentales en un contexto económico. El manejo de la inflación subyacente y la respuesta a factores externos destacan la resiliencia del país.
La inflación en México ha registrado un incremento significativo durante la primera quincena de mayo de 2024, alcanzando una tasa anual del 4.78%, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Este aumento representa una continuación en la tendencia alcista de los precios, sumando ya tres meses consecutivos de crecimiento.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) disminuyó un 0.21% a tasa quincenal; sin embargo, comparado con el mes anterior, el indicador pasó de 4.65% en abril a 4.78% en los primeros quince días de mayo. La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles y proporciona una mejor perspectiva de la tendencia inflacionaria a largo plazo, registró un aumento del 0.15% a tasa quincenal y del 4.31% a tasa anual.
Dentro de los productos y servicios que más contribuyeron al aumento de la inflación se encuentran el chile poblano, con un incremento del 15.32%, el chile serrano, con un alza del 13.99%, y el jitomate, con un incremento del 10.44%. Por otro lado, algunos productos experimentaron una disminución en sus precios, como la electricidad, con una baja del 21.45%, y el melón, con una reducción del 13.65%.
Los expertos señalan que entre los principales factores que podrían influir en la inflación en los próximos meses se encuentran la volatilidad en los precios de los energéticos, las fluctuaciones en el tipo de cambio y las políticas monetarias adoptadas tanto a nivel nacional como internacional.
LA INFLACIÓN EN EL 2024
La estabilidad de la inflación en México durante el 2024 ha sido un tema de interés nacional. A pesar de los retos económicos globales, el país ha mostrado una resiliencia notable. La inflación general ha mostrado una tendencia estable, lo cual es un indicador positivo para la economía. Los esfuerzos del gobierno para controlar la inflación han incluido políticas monetarias y fiscales prudentes, así como medidas para fortalecer el mercado interno y aumentar la productividad.
