El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, aseguró que no renunciará a su cargo a pesar de la violencia que ha afectado a la entidad durante las últimas tres semanas.
Durante su presencia en el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde acudió a la ceremonia de transmisión de poderes, Rocha Moya fue cuestionado por reporteros sobre la situación de seguridad en Sinaloa.
El mandatario estatal subrayó que fue elegido por el pueblo y que cuenta con el apoyo de la presidenta Claudia Sheinbaum.
«No existe la posibilidad de que eso ocurra (su renuncia). No hemos hecho nada que nos lleve a esa situación», afirmó.
EL PUEBLO LO ELIGIÓ
Rocha enfatizó que, aunque algunos desean su salida, él fue electo por la ciudadanía y responde a sus necesidades con firmeza.
“Lamentablemente, la violencia es un problema presente en muchas partes, pero estamos enfrentándola con carácter y determinación. Además, tengo el respaldo de la presidenta Sheinbaum”, añadió.
Rubén Rocha Moya, gobernador de #Sinaloa, asistente a la #TomaDeProtesta presidencial de Claudia Sheinbaum, habló sobre la situación de seguridad que vive el estado y las acciones para terminar con la problemática.#EFSheibaumPresidenta
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— El Financiero Nacional (@EF_Nacional) October 1, 2024
Desde hace tres semanas, Sinaloa enfrenta una ola de violencia provocada por divisiones internas del Cártel de Sinaloa tras la captura en Estados Unidos de Ismael «El Mayo» Zambada el 25 de julio.
Ante esta situación, el gobierno mexicano ha desplegado más de 2,200 efectivos de las Fuerzas Armadas, aunque tanto el ex presidente López Obrador como altos mandos militares han señalado que el fin de los enfrentamientos depende de la tregua entre los grupos delictivos del cártel.