Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Cámara de Senadores de México, lanzó un enérgico llamado al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para que reconsidere sus planes sobre la «deportación masiva» que ha amenazado implementar a partir de su toma de posesión en enero de 2025.
En un video difundido en sus redes sociales, Noroña calificó las políticas migratorias propuestas por Trump como «infames» e «inaceptables», instando al republicano a modificar sus decisiones en favor de la justicia.
El senador de la bancada de Morena señaló que millones de personas migrantes han contribuido significativamente a la economía y cultura de Estados Unidos, y que la deportación masiva sería no solo inhumana, sino también un acto de discriminación.
“No puede haber una América grande con racismo ni con discriminación. No puede haber una América grande que niegue a sus hijos y a sus hijas, que ya han contribuido para la grandeza de este país”, subrayó Noroña.
EN DEFENSA DE LOS MIGRANTES
El discurso del legislador, que se dio frente a una estatua de Benito Juárez en Chicago, se centró en la discriminación que enfrentan los migrantes, especialmente aquellos de origen no anglosajón. Noroña denunció que, a pesar de su valiosa aportación a la nación, muchos de ellos solo reciben «desprecio, maltrato y racismo».
Además, hizo hincapié en que los inmigrantes mexicanos aportan cerca de 3.7 trillones de dólares a la economía estadounidense.
El senador no solo habló en defensa de los mexicanos, sino de todos los migrantes que, buscando nuevas oportunidades y libertad, han decidido hacer de Estados Unidos su hogar.
HISTORIAL DISCRIMINATORIO
Recordó la historia de discriminación racial en el país, citando la figura de Martin Luther King, quien luchó por la igualdad y pagó con su vida en busca del respeto a la dignidad humana.
Finalmente, Noroña hizo un llamado a Trump para que «abra su corazón» y reconsidere las políticas que amenazan con dividir familias y negar la nacionalidad a los hijos de inmigrantes. Según el senador, estas medidas no solo son injustas, sino profundamente inhumanas.