El portavoz de la Embajada de China en Estados Unidos, Liu Pengyu, respondió enérgicamente a la amenaza del presidente electo Donald Trump de imponer un arancel del 10% a todos los productos chinos a partir de enero de 2025.
En un mensaje publicado en su cuenta oficial de la red social X, Liu afirmó que “nadie ganará una guerra comercial o arancelaria” y destacó la importancia de la cooperación económica entre ambas potencias.
Trump anunció esta medida en su plataforma Truth Social, argumentando que el objetivo es frenar la entrada de fentanilo a Estados Unidos. Según el mandatario electo, este opioide sintético, responsable de más de 150 muertes diarias por sobredosis en el país, se origina en gran parte en China antes de llegar a EE. UU., principalmente a través de México.
“He mantenido muchas conversaciones con China sobre las enormes cantidades de droga, en particular el fentanilo, que se envían a Estados Unidos, pero ha sido en vano”, escribió Trump, criticando la supuesta falta de acción por parte de las autoridades chinas.
El exmandatario también recordó que, durante su primer mandato, representantes chinos le prometieron imponer penas severas, incluida la pena de muerte, contra los narcotraficantes responsables, pero acusó a Beijing de no cumplir.
CHINA DESMIENTE ACUSACIONES DE TRUMP
En respuesta, Liu desmintió las acusaciones y enfatizó que “la idea de que China permite deliberadamente que los precursores químicos del fentanilo fluyan hacia Estados Unidos va completamente contra los hechos y la realidad”.
China-US economic and trade cooperation is mutually beneficial in nature. No one will win a trade war or a #tariff war.
The counternarcotics authorities of #China and the #US have resumed regular communication since the San Francisco Summit. The Chinese side has notified the US… https://t.co/1EPLyApiy9— Liu Pengyu 刘鹏宇 (@SpoxCHNinUS) November 26, 2024
Además, destacó que las agencias antinarcóticos de ambos países han reanudado las comunicaciones regulares desde la reunión entre Xi Jinping y Joe Biden en San Francisco el año pasado.
El diplomático subrayó los esfuerzos de China en la lucha contra el narcotráfico, incluyendo la colaboración con solicitudes de Estados Unidos para verificar casos específicos y tomar medidas concretas.
VIEJAS RENCILLAS
Las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos no son nuevas. Trump, durante su primer mandato, inició una guerra comercial contra Beijing con la imposición de aranceles y ha prometido endurecer aún más estas políticas.
Su postura, centrada en proteger empleos estadounidenses, incluye imponer aranceles de hasta el 20% para todos los productos importados y hasta el 60% para aquellos provenientes de China.
La escalada en el discurso de Trump y la firme respuesta de China anticipan un escenario complejo para las relaciones bilaterales, con implicaciones económicas y diplomáticas de gran alcance.