Por José García Sánchez
X: @Josangasa3
La rusofobia regresa a las campañas electorales de México. Acusaciones sobre el apoyo del oro de Rusia a la campaña de Morena, desde los mismos siniestros rincones de la comentocracia conservadora de alquiler vuelve a ocupar espacios en los medios de la mentira.
En cuestión de desestabilización política no todo lo que proviene del extranjero es dinero, aunque se cuentan millones de dólares enviados a los grupos conservadores mexicanos desde algunos oscuros rincones de la administración pública del vecino del norte, que, inevitablemente se suman a las divisas de nuestro país.
También hay información con ese objetivo que no siempre es cierta pero cuentan con propio grupo de choque informativo o carne de cañón mediático en algunos escritores y escritoras en México y América Latina y no se diga comunicadores que disfrazan de análisis político los misiles ideológicos, que los ingenuos escribanos mexicanos retoman de la DEA, sin verificar su autenticidad, para nutrir sus textos y darlos como resultado de una investigación, cuando en realidad las buscan para que formen parte de las acusaciones sin pruebas que hacen contra la actual administración pública.
La insistencia tiene sus motivos aunque su reiteración no mueva a considerar verdad su contenido, así desde la perspectiva de un conservadurismo subsidiado por Estados Unidos encontramos que las guerra internas en el país muchas veces son promovidas y patrocinadas desde el vecino del norte. El nado sincronizado de Fake News, las corruptelas inventadas a la administración pública, las responsabilidades de desvíos de funcionarios públicos, etc. tienen un origen orquestado planeado y que corresponden a una estrategia bien planeada
Habrá que estar alerta de todo lo que proviene de Estados Unidos en materia preelectoral, si bien la amistad a través del presidente del vecino país y su embajador en México ha dado muestras de congruencia, la DEA, que depende del Departamento de Justicia, se convierte en el único puente para una invasión que podría arrojar un golpe de estado suave o agresivo.
La DEA cumplió 50 años el 1 de julio del año pasado, motivo por el cual se realizó un balance donde hay más complicidad con el crimen organizado que guerra contra el narcotráfico. Algo así como una guerra de Calderón, pero convertida en agencia antidrogas.
Complicidades, sobornos, robo, desinformación, tortura, desaparición, adicciones, extorsiones, filtración de información, son algunas de las actividades secretas de la agencia que dice combatir las drogas en el país donde más se consumen.
Los panistas, siguiendo su tradicional conducta de traición a la patria, piden que haya más agentes de la DEA en nuestro territorio. El PAN, en voz de su desgastado líder nacional, Marko Cortés, exigió que la DEA tuviera mayor presencia en México.
La revista Contralínea publica recientemente sobre el tema: “El Informe sobre revisión de operaciones extranjeras de la DEA se basa en una “evaluación independiente” de las operaciones de esa agencia en otros países, realizado por el ex fiscal federal Boyd Johnson y por el exjefe de la DEA Jack Lawn, es la primera evaluación en su tipo, después de que una auditoría interna del Departamento de Estado criticara la “insuficiente” supervisión en 2021”.
A pesar de esto hay quienes retoman información proporcionada por la DEA para rellenar espacios en sus libros. Acusaciones sin pruebas y contenidos que le sirven a la mafia incrustada dentro de la agencia para que se difunda como verdad absoluta y, al mismo tiempo, desestabilice no sólo el sistema de seguridad de México, sino al gobierno que la instaura.
Difícil creerle a la DEA, más aún cuando ofrecen ellos los contenidos que se aceptan y publican sin comprobar y sólo basta con decir “según documentos de la DEA”.
Periodistas escriben libros sin más pruebas que les ofrece la DEA y en ellas se engolosinan adjudicando responsabilidades por aproximación, asociando por capricho a personajes a los que quien atacar y especulando sobre posibles implicados en el material que tiene a bien entregarles la agencia.
Personajes dedicados al desprestigio como las autoras de El Rey del Cash y El Gran corruptor, o Los señores del Narco, entre otros, retoman información de la DEA que desde el momento en que cuestionan la honestidad de las actuales autoridades, se trata de una información válida. Por i fuera poco, disfrazan los contenidos como si se tratara de una investigación periodística profunda.
La CIA desde su nacimiento, en 1947, tiene como parte de su intervención en otros países del mundo, información falsa que tiene como único objetivo preparar golpes de Estado, allanar en el camino en la opinión pública para convencerla de la necesidad de un cambio violento en la política.
Poco a poco la CIA y la DEA han intercambiado atribuciones, el espionaje es común en ambas agencias y la intención de desestabilizar gobiernos las hermana. Nadie puede tomar su información como cierta, se trata de agencias que han desestabilizado la política democrática de naciones enteras. Ni siquiera puede ser su información un referente si no se comprueban sus dichos, pero hay quienes toman sus “investigaciones” como una verdad absoluta.
Los libros con información “recomendada” por la DEA son un puente que ingenuamente fortalecen a quienes sólo les interesa atacar con odio irracional a un gobierno con el que no comulgan o, en el mejor de los casos, ganar dinero.
Hablamos de un golpe en cierne, transnacional, que tarde o temprano dará muestras de su intención, por lo pronto ya sembró dudas, especulaciones, rumores, odios, en varios libros que desde la DEA dictaron a algunas periodistas.
