La Ciudad de México se renueva con medidas ambientales progresistas por medio de una Ley, reflejando un esfuerzo colaborativo para un futuro sostenible. Legisladores y activistas unen fuerzas, respondiendo a desafíos ambientales y comprometiéndose con los objetivos de Desarrollo Sostenible.
El Congreso local aprobó la ley ambiental de la Ciudad de México, y de responsabilidad para aplicar a la ciudadanía para exigir a cualquier persona física o moral la reparación del daño que ocasione a la naturaleza. Estas leyes también integran las voces de la sociedad civil, legisladores y activistas en su formulación.
Las recientes modificaciones legislativas reflejan un esfuerzo colaborativo sin precedentes. Colectivos, legisladores y activistas medioambientales han tenido un papel crucial en la conformación de estas leyes, asegurando que las políticas ambientales sean representativas y efectivas.
COMPROMISO CON EL DESARROLLO SOSTENIBLE
La nueva normativa ambiental de la Ciudad de México es un paso esencial para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Con estas leyes, la ciudad se compromete a ser un modelo de sostenibilidad y responsabilidad ecológica.
El pleno del Congreso local ha dado luz verde a la ley ambiental, que incluye reformas significativas como la modificación del artículo 65 de la Ley de Residuos Sólidos y la derogación de varios artículos obsoletos, fortaleciendo así la protección de la tierra.
RESPUESTA A LOS DESAFÍOS ACTUALES
La diputada Tania Larios Pérez destacó que la ley responde a los desafíos globales y locales, abordando problemas como la calidad del aire y la pérdida de biodiversidad.
Sin embargo, la legisladora Gabriela Salido Magos enfatizó la necesidad de un estudio de impacto presupuestal para asegurar la efectividad de la ley.
La Ciudad de México, una de las megalópolis más grandes del mundo, enfrenta retos ambientales significativos. La nueva ley busca abordar estos desafíos, promoviendo la preservación de áreas naturales y la reforestación urbana para mejorar la calidad de vida y la resiliencia climática.
La ley se organiza en seis títulos esenciales que abarcan desde disposiciones generales hasta medidas de control y sanciones, estableciendo un marco integral para la gestión ambiental en la ciudad.