China ha presentado protestas serias ante Estados Unidos por las acusaciones lanzadas contra China hechas por el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, durante su reciente visita a Centroamérica, informó el pasado viernes un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Rubio visitó Panamá, El Salvador, Costa Rica, Guatemala y la República Dominicana entre el 1 y el 6 de febrero, durante su gira lanzó comentarios relativos a China, en los que afirmó estar “contrarrestando la influencia del Partido Comunista de China” en el hemisferio occidental.
El vocero chino dijo que los comentarios del funcionario estadounidense son infundados y están impregnados de la mentalidad de la Guerra Fría, así como llenos de prejuicios ideológicos, son acusaciones sin fundamento contra China dirigidas a sembrar la discordia entre el gigante asiático y los países de América Latina, y que interfieren en los asuntos internos de China y socavan los derechos e intereses legítimos y legales del país asiático.
Sobre la cooperación de su país con América Latina, manifestó que China está comprometida a cultivar lazos de amistad y cooperación con los países de la región bajo el principio de respeto mutuo, igualdad, beneficio mutuo, apertura, inclusión y cooperación beneficiosa para todos.
“Entre China y los países de América Latina y el Caribe no hay cálculos geopolíticos de suma cero ni de ‘el ganador que se lo lleva todo’, solo apoyo mutuo sincero y cooperación para el progreso compartido”, afirmó el portavoz.
“Nunca ponemos ataduras a la cooperación práctica entre China y los países de América Latina y el Caribe, ni tenemos en la mira a ningún tercero”, manifestó, y añadió que la cooperación satisface las necesidades de los países de la región, es mutuamente beneficiosa y ha aportado beneficios tangibles a los países pertinentes y mejorado la vida de la población local.
El vocero indicó que la parte estadounidense “señala con el dedo” a la cooperación entre los países de América Latina y el Caribe con China, lo que significa una profunda falta de respeto por los países al sur de su frontera.