Caso Ayotzinapa: destapan a «La Rana» clave en la desaparición de estudiantes

El medio de noticias Milenio, reveló que tenía en su poder una copia de la entonces PGR sobre el caso Ayotzinapa y en ellas se encuentra una pieza clave para todo el caso: «La Rana», un presunto sicario de la organización criminal Guerreros Unidos, que habría participado en la desaparición de los 43 normalistas.

De acuerdo con Milenio, en 9 años Édgar Damián Sandoval Albarrán, La Rana, no ha rendido cuentas a las autoridades. Cabe mencionar que las fuerzas policiales del país creyeron haberlo capturado en 2018. Sin embargo, se trataba de un ciudadano con nombre Erick que no tenía nada que ver con La Rana. 

Según  menciona Milenio, el verdadero implicado huyó a Los Ángeles, California, Estados Unidos, país al que no se le ha solicitado su detención con fines de extradición.

Su testimonio resultaría un punto clave para confirmar o negar los dichos que sus supuestos socios criminales dieron de lo ocurrido entre el 26 y 27 de septiembre de 2014.

Sus apodos: Rana o Güereque, fueron repetidamente mencionados por otros de los detenidos que supuestamente participaron en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa.

De acuerdo con Milenio, otro relato de alto valor probatorio y que menciona a La Rana o Güereque es la entrevista desclasificada, obtenida por MILENIO vía transparencia, que Juan Miguel Pantoja Miranda El Pajarraco dio a visitadores de la CNDH cuando estuvo detenido en 2018.

Reconocimiento de la Rana 

El Pajarraco lo identificó como El Wereke. Mencionó que tenía ese apodo por su color de piel, que era sicario del grupo Guerreros Unidos y siempre estaba armado. Declaró que tenía tatuajes de rana en la espalda y unas flamas en el brazo. Afirmó que participó en la desaparición de los estudiantes y disparó contra los que se movían. También lo señaló como uno de los que bajó a los jóvenes de una de las camionetas que llegaron al basurero de Cocula.
Documento Chereje

Documento Lucas

Documento Pajarraco

Milenio relata en su reportaje que antes de que se añadiera su fotografía al expediente del caso, la PGR contaba con un retrato hablado, que peritos hicieron tomando como base las declaraciones de sus supuestos cómplices. La hoja del retrato incluye la leyenda: “La Rana o Güereque o Edgar (sicario)”. Y su verdadero nombre: “Edgar”.
retrato de la Rana

Documento Jona

El apodo, el tatuaje y la huída a Los Ángeles

El apodo y tatuaje en la espalda coinciden con el que familiares del señalado admitieron saber que tenía desde 2007. Y que la CNDH confirmó en su intento por liberar al detenido equivocado.

De acuerdo con Milenio, visitadores de la CNDH acudieron a Cocula, Guerrero, y entrevistaron al tatuador que le atendió al sospechoso. Admitió conocer a Edgar, lo reconoció en fotografía y explicó cómo era el tatuaje que le hizo.

El tatuador señaló que estaba en la parte superior izquierda de la espalda. Que en efecto era la figura de una rana y que se la hizo con tinta permanente color verde.

En una hoja tamaño carta, el tatuador dibujó la figura y fue integrada al expediente del caso que tiene en su poder la FGR.

Los datos con los que cuenta la FGR y obtenidos por Milenio, señalan que cuando La Rana huyó a Los Ángeles vivía con su esposa, en casa de un tío de ella.

En la PGR, la fiscalía a cargo de investigar el caso integró la documentación al expediente para determinar si Edgar efectivamente es a quien los presuntos autores materiales de la desaparición de los 43 normalistas identifican como La Rana o El Güereque.

Quien en 2018 encabezaba esa fiscalía y destacó la detención, cuando pensaron haberlo capturado, es Alfredo Higuera Beltrán, actualmente titular de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (Femdo) de la FGR.

 

 

Retrato de 'El Rana' (Especial)