Carrera por la Suprema Corte: ministras de la 4T buscan la presidencia

Un total de 3 mil 422 candidatos federales comenzaron este domingo la campaña para la primera elección popular del Poder Judicial, programada para el 1 de junio. Casi 100 millones de votantes podrán escoger a 881 nuevos funcionarios, incluyendo a los nuevos integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Las actuales ministras de la Corte, Loretta Ortiz, Yasmín Esquivel y Lenia Batres, iniciaron sus actividades proselitistas en la Ciudad de México y el Estado de México con el objetivo de obtener la mayor cantidad de votos y convertirse en la primera presidenta electa del máximo tribunal.

“Gracias por acompañarme en el inicio de esta campaña histórica, por primera vez en la historia de México se van a elegir a los integrantes del Poder Judicial federal y local, es una fecha trascendente”, declaró Ortiz en su primer evento, realizado en el auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

DEFENSA DE LA REFORMA JUDICIAL

Las tres ministras, propuestas por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, respaldaron la reforma constitucional al Poder Judicial, promulgada en septiembre con el apoyo de la actual presidenta, Claudia Sheinbaum.

Ortiz, quien también es fundadora de Morena, afirmó que la reforma permitirá un Poder Judicial que será «la envidia de todos los países». Asimismo, prometió priorizar los derechos laborales, energéticos y la perspectiva de género.

“Yo quiero ser ministra de la Suprema Corte porque les quiero servir a ustedes, al pueblo de México. Todos somos pueblo de México”, manifestó Ortiz.

PROMESAS DE INDEPENDENCIA JUDICIAL

En medio de señalamientos de la oposición y organismos internacionales sobre una posible intromisión del Ejecutivo en el proceso electoral, Esquivel aseguró que su candidatura busca garantizar «jueces verdaderamente imparciales que no respondan a consignas económicas o políticas».

“Mi compromiso es garantizar la independencia y autonomía del Poder Judicial. Estas no están reñidas con el entendimiento y la colaboración entre poderes. Por el contrario, fortalecen el Estado de derecho”, sostuvo.

Los candidatos no recibirán recursos públicos para sus campañas, pero podrán utilizar fondos propios con límites establecidos: desde 220 mil pesos para aspirantes a juzgados hasta 1.4 millones de pesos para quienes buscan un puesto en la SCJN.

Desde el Tecnológico de Estudios Superiores de Ecatepec (TESE), Esquivel destacó la necesidad de una “justicia real” que no distinga apellidos ni esté al servicio de intereses económicos.

JUSTICIA PARA LOS SECTORES OLVIDADOS

Por su parte, Lenia Batres, desde Tlalpan, se comprometió a impulsar la justicia social, garantizar el acceso a la justicia y fomentar la austeridad dentro del Poder Judicial.

“Es tiempo de abrir la justicia a quienes han sido olvidados y olvidadas, a las mujeres, a niños con alguna discapacidad, a los grupos vulnerables”, expresó.

Con un proceso electoral inédito en puerta, la campaña de las ministras promete marcar un nuevo rumbo para el Poder Judicial en México.