El bloqueo en las autopistas México-Puebla y Arco Norte, llevado a cabo por ejidatarios de Santa Rita Tlahuapan, ha causado un impacto económico significativo.
Las empresas que transportan mercancías por estas rutas son las más afectadas, con alrededor de 10 mil toneladas de productos perecederos varados, según la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar). El bloqueo ha interrumpido la conectividad entre el norte y el sureste del país, afectando el transporte de mercancías esenciales como alimentos, líquidos, autos y autopartes.
Más allá de las pérdidas económicas, el bloqueo también ha tenido un impacto humano. Los conductores de los camiones que transportan las mercancías se ven afectados, ya que no tienen acceso a servicios básicos como aseo personal, alimentación e incluso servicios sanitarios. La movilidad de las personas también se ve limitada, ya que los autobuses de pasajeros no pueden transitar.
Miguel Ángel Martínez Millán, presidente de Canacar, hizo un llamado a las autoridades para que liberen de inmediato las vías de comunicación bloqueadas, a través de las acciones pertinentes conforme a derecho. Martínez Millán confirmó que ya se han reunido con las secretarías de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y de Gobernación (Segob) para exponer las afectaciones.
El bloqueo, que ha durado más de 48 horas, ha causado una pérdida estimada de más de 10 mil millones de pesos. Este número aumenta con cada minuto que pasa, impactando no solo a la industria del transporte, sino también a la cadena de valor en general, en particular los productos de primera necesidad y los perecederos. Martínez Millán concluyó pidiendo a las autoridades que liberen estos puntos de cruce esenciales para la industria del transporte.
