El cenotafio dedicado a Edgar Guzmán López, hijo mayor de Joaquín “El Chapo” Guzmán, fue atacado en Culiacán con lo que se presume es un objeto explosivo.
Este monumento fue erigido en 2008 en recuerdo de Guzmán López, quien fue asesinado a balazos junto a su primo Cesar Ariel Loera y Arturo Meza Cazares, hijo de “La Emperatriz”.
El ataque ocurrió en una zona de estacionamiento en el desarrollo comercial Tres Ríos, cerca de City Club, sobre la avenida Universitarios en Culiacán, Sinaloa. La explosión ha ocasionado daños considerables en la estructura del cenotafio, que es una gran cruz construida en memoria de Edgar Guzmán López.
Hasta el momento las autoridades aún no han confirmado la causa exacta de la explosión, pero se sospecha que se trató de un ataque intencionado.
CONFLICTO INTERNO ENTRE FACCIONES DEL CÁRTEL DE SINALOA
La destrucción del cenotafio ocurre en medio de la continua guerra entre facciones del antiguo Cártel de Sinaloa. En el pasado, Edgar Guzmán López fue asesinado en un conflicto interno dentro de la organización criminal, entre Joaquín “El Chapo” Guzmán y los hermanos Beltrán Leyva.
Edgar Guzmán era hermano de Ovidio y Joaquín Guzmán, ambos actualmente detenidos en prisiones de Estados Unidos, y medio hermano de Jesús Alfredo e Iván Archivaldo, líderes de la facción conocida como «Los Chapitos».
El conflicto entre Los Chapitos, liderados por los hijos de El Chapo, y la facción dirigida por Ismael “El Mayo” Zambada y su hijo Ismael Zambada Sicairos, conocido como «El Mayito Flaco», se ha intensificado desde la detención de “El Mayo” Zambada a principios de julio. Desde entonces, Culiacán y otras partes de Sinaloa han sido escenario de enfrentamientos violentos, asesinatos y desapariciones.
