El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha solicitado a Tomás Zerón, exfuncionario de la desaparecida PGR y exjefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), que regrese al país, ratifique sus declaraciones y se entregue a las autoridades.
López Obrador calificó como “truculenta” la afirmación de Zerón, en la que involucra al expresidente Enrique Peña Nieto en la creación de la «verdad histórica» del Caso Ayotzinapa.
Durante la mañanera en Palacio Nacional, López Obrador subrayó la importancia de que Zerón regrese a México para declarar y asumir su responsabilidad, señalando que hay acusaciones en su contra por presuntamente haber coordinado actos de tortura para que los testigos declararan en favor del Gobierno de ese entonces.
“Si él recibió instrucciones como se indica en la declaración, que lo dé por escrito y que se entregue a la autoridad, el que nada debe nada teme, ¿para qué se va a Israel a protegerse?”, señaló.
AMLO dice que se le hace truculento que ahora Tomás Zerón le quiera echar la culpa a Peña Nieto
«Depende de FGR si EPN debe ser citado a declarar o no sobre el caso Ayotzinapa» pic.twitter.com/U02Tq4Fwh2
— JUCA Noticias (@JucaNoticias) August 26, 2024
López Obrador también criticó a Zerón por intentar responsabilizar al expresidente Peña Nieto ahora, describiendo sus acciones como “truculentas”.
La declaración de Zerón surgió después de responder a un cuestionario de 70 preguntas enviado por Alejandro Encinas, entonces subsecretario de Gobernación y titular de la Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa.
En sus respuestas, Zerón detalló quién ordenó desviar las investigaciones y cómo se construyó la versión oficial de los hechos, apuntando hacia el expresidente Peña Nieto.
Zerón, acusado de ser uno de los principales responsables de la «verdad histórica», enfrenta cargos por presuntamente ocultar pruebas y torturar a testigos en relación con la desaparición de los 43 estudiantes el 26 de septiembre de 2014.
México ha solicitado su extradición desde Israel desde septiembre de 2020, pero la falta de un acuerdo de extradición entre ambos países ha complicado el proceso.
López Obrador ha enviado dos cartas a Israel sobre este asunto, una en septiembre de 2021 y otra en 2023, en un intento por facilitar la extradición.