En el marco de la conmemoración del 5 de mayo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, encabezaron una ceremonia histórica que reafirmó el compromiso del Estado mexicano con la defensa de la soberanía nacional y la continuidad de la Cuarta Transformación.
Desde el sitio emblemático donde el Ejército de Oriente, comandado por Ignacio Zaragoza, derrotó al ejército francés en 1862, Sheinbaum y Armenta recordaron que la victoria en Puebla marcó un parteaguas en la historia nacional y representa hoy una inspiración frente al neoconservadurismo contemporáneo. En su mensaje, el gobernador Alejandro Armenta destacó el papel fundamental de los combatientes originarios de Tetela de Ocampo, Zacapoaxtla y Xochiapulco los llamados ‘hijos de las montañas’ quienes, bajo un liderazgo liberal, defendieron con honor la soberanía y la dignidad nacional. Armenta subrayó que este legado sigue vivo en los ideales de la Cuarta Transformación.
El pueblo de Puebla ha sido protagonista de las grandes transformaciones de México. Hoy, con la guía de la presidenta Sheinbaum, estamos construyendo el segundo piso de este gran proyecto nacional que combate los privilegios y promueve la justicia social, afirmó el mandatario estatal.
LA CUARTA TRANSFORMACIÓN COMO HEREDERA DEL LIBERALISMO JUARISTA
La ceremonia rememoró los principios de la Constitución de 1857 y la lucha de Benito Juárez por un Estado laico, soberano y con justicia para todos. Lo cual la presidenta Sheinbaum vinculó estos ideales con los objetivos actuales del gobierno: soberanía energética, alimentaria, tecnológica y económica.
También advirtió sobre los riesgos del neoconservadurismo, al que se acusó de buscar el retorno del intervencionismo y el saqueo de los recursos nacionales.
PUEBLA, BASTIÓN DE LA SOBERANÍA Y EL CAMBIO
Armenta reafirmó que Puebla es hoy un bastión de la transformación y el desarrollo con justicia, siguiendo la ruta marcada por los héroes del 5 de mayo y el liderazgo actual de la presidenta.
