El Cártel de Colima, también conocido como el Cártel de los Amezcua, fue una organización criminal mexicana dedicada al tráfico, producción de metanfetaminas y otros estupefacientes.
La organización criminal fue fundada a finales de la década de 1980 por los hermanos José de Jesús, Adán y Luis Ignacio Amezcua Contreras, el grupo se destacó por su especialización en drogas sintéticas, convirtiéndose en uno de los principales proveedores hacia Estados Unidos .
Las grabaciones divulgadas por Gutiérrez Priego contienen presuntas conversaciones entre la esposa del expresidente Ernesto Zedillo y Amezcua Contreras, así como entre este último y otros individuos vinculados al narcotráfico.
En los audios, se mencionan intercambios financieros y se alude a relaciones con figuras del entretenimiento, como el fallecido conductor de televisión Francisco ‘Paco’ Stanley. Sin embargo, es importante señalar que las grabaciones solo presentan una parte de las conversaciones.
¿QUÉ PASO CON LA ORGANIZACIÓN?
A diferencia de otros grupos criminales, el Cártel de Colima no buscó controlar territorios. Su fortaleza radicaba en una estructura discreta y eficiente enfocada en el negocio internacional. En su apogeo, se convirtió en uno de los principales proveedores de drogas sintéticas hacia Estados Unidos.
Las autoridades mexicanas y estadounidenses comenzaron su desmantelamiento a finales de los años 90s. La captura de los líderes del cártel entre 1997 y 2002 lo que debilitó seriamente sus operaciones. Con el tiempo, sus rutas y contactos fueron absorbidos por organizaciones como el Cártel de Sinaloa.
Aunque el Cártel de Colima ya no opera, su impacto fue decisivo en el desarrollo del narcotráfico moderno en México.
¿Y CON GUTIÉRREZ REBOLLO?
El general Gutiérrez Rebollo, padre de César Gutiérrez Priego, fue una figura clave en la lucha contra el narcotráfico en México. En 1997, fue detenido y acusado de proteger al Cártel de Juárez, liderado por Amado Carrillo Fuentes, conocido como ‘El Señor de los Cielos’. Sin embargo, años después, varios testigos se retractaron de sus declaraciones, alegando que fueron obtenidas bajo presión por parte de autoridades federales.
La divulgación de estas grabaciones ha generado un amplio debate en la opinión pública. mientras algunos consideran que las evidencias presentadas son insuficientes para establecer vínculos claros entre la esposa de Zedillo y el narcotráfico, otros señalan la necesidad de una investigación más profunda para esclarecer los hechos y determinar posibles responsabilidades.