Israel detuvo este domingo 2 de marzo la entrada de todos los bienes y suministros en la Franja de Gaza y amenazó con «consecuencias adicionales» si Hamás no aceptaba una nueva propuesta de prórroga de la primera fase de un frágil alto el fuego.
A su vez, Hamás acusó a Israel de intentar echar por la borda la tregua y afirmó que la decisión del gobierno israelí de cortar la ayuda era «una extorsión barata, un crimen de guerra y un ataque flagrante al acuerdo (de alto el fuego)». Ninguna de las dos partes involucradas en el conflicto se atrevió a afirmar que el alto el fuego había terminado.
La primera fase del alto el fuego, que incluía un aumento de la ayuda humanitaria en la Franja de Gaza, terminó este sábado. Las dos partes aún tienen por delante la responsabilidad de negociar la segunda fase, en la que Hamás debía liberar a decenas de rehenes restantes a cambio de la retirada israelí del territorio palestino y un alto el fuego duradero.
La decisión se tomó en coordinación con el gobierno de Trump
Un funcionario israelí, que habló bajo condición de anonimato con medios internacionales, dijo que la decisión de suspender la ayuda se tomó en coordinación con la administración Trump.
Por su parte el gobierno israelí de Benjamin Netanyahu, declaró el domingo que apoyaba lo que describió como una propuesta del enviado estadounidense a Medio Oriente, Steve Witkoff, para ampliar la primera fase del alto el fuego durante el Ramadán y la Pascua judía, que terminan el 20 de abril.
With the conclusion of the 1st stage of the hostages deal and in light of Hamas’s refusal to accept the Witkoff framework for the continuation of the talks, to which Israel agreed, PM Netanyahu decided: as of this morning, entry of all goods & supplies to the Gaza Strip be halted
— Prime Minister of Israel (@IsraeliPM) March 2, 2025
Según la propuesta de la Casa Blanca, Hamás debería liberar a la mitad de los rehenes el primer día y al resto cuando se llegue a un acuerdo sobre un alto el fuego definitivo, según la oficina de Netanyahu. No hubo comentarios inmediatos de Estados Unidos, Egipto o Qatar, que llevan más de un año como mediadores del conflicto.
En la primera fase del alto el fuego, pactado con una duración de 6 semanas, Hamás liberó a 25 rehenes israelíes y los cadáveres de otros ocho a cambio de la liberación de casi 2.000 palestinos presos en Israel. Por su parte el ejército de Israel se retiró de la mayor parte de Gaza y permitió la entrada de ayuda humanitaria.