El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que, a partir del 20 de enero, impondrá un arancel del 25% a todos los productos importados desde México y Canadá.
Esta medida se mantendrá hasta que ambos países tomen medidas drásticas contra el tráfico de drogas, especialmente el fentanilo, y el cruce ilegal de migrantes hacia Estados Unidos.
Trump hizo este anuncio a través de su cuenta en Truth Social, donde destacó que este arancel será una de sus primeras órdenes ejecutivas como presidente. Según Trump, el arancel se aplicará a todos los productos que lleguen a Estados Unidos desde México y Canadá, debido a la preocupación por las fronteras abiertas y el impacto del comercio de drogas ilícitas.
Este arancel permanecerá vigente hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los inmigrantes ilegales detengan esta invasión de nuestro país, escribió Trump.
REACCIÓN DE MÉXICO
El gobierno de México ya ha respondido a la amenaza de los aranceles, con el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, advirtiendo que México tomaría represalias. Ebrard enfatizó que la medida afectaría a la economía estadounidense, ya que México es su principal socio comercial.
Si me aplicas un arancel del 25%, yo también tendría que aplicar aranceles a tus productos, comentó Ebrard, sugiriendo que esta política tendría un alto costo para la economía estadounidense.
Trump también anunció que impondrá un arancel adicional del 10% a los productos de China hasta que el país detenga el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos. Esta medida se suma a las tensiones comerciales previas entre ambos países.
El impacto de estos aranceles podría ser significativo para la economía global, afectando tanto a Estados Unidos como a sus socios comerciales. Las represalias comerciales podrían llevar a un aumento de los precios de productos básicos, afectando a los consumidores de ambos países.