El gobernador electo, Alejandro Armenta, destacó en un reciente encuentro que la nueva Ley Orgánica de la Administración Pública del Estado de Puebla (LOAPEP) está fundamentada en los principios de la Bioética Social y el Humanismo Mexicano, poniendo en el centro la dignidad de las personas y el bienestar de las comunidades.
Armenta subrayó que este enfoque no solo se enfoca en la administración pública, sino que también apuesta por la inclusión y el respeto a la diversidad.
“La bioética social que tomamos para las ciencias sociales es un medio para reformular la concepción que planteamos de un Estado Bioético, centrado en el cuidado y gestión de los recursos, el reconocimiento de la multiculturalidad y, sobre todo, en el respeto a las colectividades”, expresó Armenta.
Con este modelo, el gobernador electo plantea una nueva forma de gobierno en la que cada comunidad, sin importar su tamaño o posición, sea escuchada y respetada.
LA RIQUEZA DE PUEBLA ESTÁ EN EL VALOR DE CADA POBLANO Y SU CULTURA
Armenta remarcó la importancia de reconocer y valorar a cada ciudadano y cultura como parte esencial de Puebla, apostando por una administración que fomente la justicia y equidad.
Además, hizo énfasis en su compromiso con un gobierno municipalista que fortalecerá y respetará la labor de los ayuntamientos y legisladores.
«Sería una vergüenza para mí, como gobernante, intentar suprimir las funciones municipales o legislativas», afirmó Armenta, reafirmando su apoyo a la representación ciudadana y su visión de construir, de la mano con los poblanos, un gobierno ético, responsable y cercano a las necesidades reales de la población.
Con esta propuesta, Armenta propone una transformación en la estructura gubernamental, fundamentada en valores éticos y humanos, que busca que Puebla sea un ejemplo de justicia social y gobernanza participativa.