Comerciantes de la cabecera municipal de Naucalpan marcharon sobre Periférico Norte y avenida Gustavo Baz para exigir a las autoridades municipales y estatales que pongan fin a los actos de extorsión.
El pasado sábado, hombres armados dispararon para amedrentar a los comerciantes de San Bartolo, dejando tres lesionados por balas perdidas: dos niñas de 7 y 11 años, y un adulto.
“Queremos paz”, fue la consigna del contingente de manifestantes, quienes pidieron la intervención de las autoridades para acabar con los liderazgos violentos que asolan a los locatarios de la cabecera municipal. La balacera del fin de semana ocurrió después de que algunos comerciantes se negaron a pagar cuotas a supuestos líderes.
Durante la agresión del sábado, hombres armados dispararon, provocando una estampida de consumidores que intentaban escapar. Una niña de 7 años resultó herida en una mano, otra de 11 años en un pie, y un adulto en una pierna. Todos fueron trasladados a servicios médicos.
EXIGEN JUSTICIA
Este martes, vestidos de blanco, los comerciantes exigieron resultados a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) para detener a los responsables de los hechos violentos y a los extorsionadores del comercio en San Bartolo.
Los comerciantes expresaron su cansancio ante las presiones diarias de sujetos que cobran el derecho de piso. Los consumidores también manifestaron su indignación por el nivel de violencia en San Bartolo, en el primer cuadro del municipio conurbado de Naucalpan.
Amas de casa, adultos mayores, hombres y mujeres, integraron el contingente de manifestantes, incluyendo una persona en silla de ruedas, en lo que llamaron “Marcha por la Paz”.
Los comerciantes están preocupados porque, al iniciar la temporada de ventas de fin de año, temen que la inseguridad disminuya la presencia de consumidores y afecte sus ingresos económicos.
Inicialmente, los manifestantes se concentraron en el Parque Naucalli y marcharon por la lateral del Periférico Norte, tomaron la vía Gustavo Baz y llegaron a la explanada del Palacio Municipal, esperando ser atendidos por las autoridades.
