El juez Nunes Marques, del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, ha decidido remitir al Pleno dos demandas que cuestionan la suspensión de la red social X en el país.
Esta suspensión fue determinada el 30 de agosto por el juez Alexandre de Moraes y ratificada el lunes por la Primera Sala. Marques ha otorgado cinco días a la Procuraduría General de la República (PGR) y a la Procuraduría General de la Unión (AGU) para que se pronuncien sobre las solicitudes del partido Novo y de la Orden de Abogados de Brasil (OAB), que cuestionan la decisión.
El magistrado subrayó que el bloqueo de la plataforma virtual es un asunto delicado que exige prudencia por parte del STF, por lo que no se tomará una decisión individual.
Según un sondeo reciente, los brasileños están divididos sobre la orden del juez De Moraes de prohibir la red en el país. Una ligera mayoría de los encuestados considera que el juez tiene razón en su disputa con el multimillonario propietario de X, Elon Musk. Sin embargo, las multas impuestas a los usuarios de VPN y el congelamiento de las cuentas de Starlink se perciben como “abusivas”.
La encuestadora AtlasIntel informó que el 50.9% de los encuestados los días 3 y 4 de septiembre estaba en desacuerdo con la decisión de De Moraes de suspender la plataforma en el país, mientras que el 48.1% estaba de acuerdo y el 0.9% no supo responder.
MIGRACIÓN DE USUARIOS
En este contexto, los brasileños han comenzado a emigrar de la red social de Musk. En los tres primeros días desde el cierre, Bluesky, desarrollada por Jack Dorsey, registró más de dos millones de nuevos usuarios. Esto hizo que el portugués se convirtiera en la lengua más utilizada en la plataforma, según informó la empresa a la AFP.
