El peso mexicano se apreciaba este viernes, cotizando a 19.8084 por dólar, con una ganancia de 0.26% frente al precio de referencia de Reuters del jueves.
Este movimiento se debe a un retroceso generalizado del dólar tras la divulgación de cifras del empleo estadounidense menores a lo previsto, lo que avivó expectativas de que la Reserva Federal podría iniciar una agresiva ronda de recortes de tasas este mes.
El jueves, el peso llegó a debilitarse hasta 20.1520 unidades, su peor nivel desde octubre de 2022, debido a preocupaciones locales por el avance en el Congreso de una polémica reforma judicial.
Esta reforma ha generado “incertidumbre” en los mercados, afectando temporalmente la confianza en la moneda nacional.
Según los datos del viernes, las nóminas no agrícolas aumentaron en 142 mil puestos de trabajo en agosto, por debajo de los 160 mil esperados por el mercado.
A pesar de este crecimiento menor al esperado, la tasa de desempleo descendió a 4.2%, lo que sugiere una cierta resiliencia en el mercado laboral estadounidense.
El peso se perfilaba a cerrar la semana con una pérdida acumulada de 0.50%. Este comportamiento refleja la volatilidad actual del mercado, influenciada tanto por factores internos como externos.
En la Bolsa Mexicana de Valores, el índice líder S&P/BMV IPC subía 0.11% a 51,720.04 puntos, aunque se encaminaba a culminar la semana con un retroceso acumulado de 0.50%.
Este índice, que agrupa a las acciones más negociadas del mercado doméstico, ha mostrado fluctuaciones en respuesta a las noticias económicas y políticas recientes.
