La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados ha aprobado un dictamen que devuelve el mando de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El dictamen fue aprobado con 22 votos a favor y 17 en contra, tras más de cinco horas de debate. Se presentaron 22 reservas, todas desechadas excepto una, que promueve una mayor colaboración entre la GN y los gobiernos locales.
Este cambio permite que un general de división dirija la GN, buscando revertir un fallo previo de la Suprema Corte y fortalecer la lucha contra el crimen organizado. La Comisión de Puntos Constitucionales ha dado luz verde a un dictamen que podría cambiar el panorama de la seguridad en México.
La propuesta, que ha generado un intenso debate en la Cámara de Diputados, transfiere el mando operativo y administrativo de la GN a Sedena, permitiendo además que un general de división esté al frente de la institución.
La oposición ha expresado su preocupación, sugiriendo que la medida “perfecciona la militarización del país”. Sin embargo, Morena y sus aliados defienden la reforma como un medio para combatir el crimen con mayor eficacia, destacando la capacidad de la GN para llevar a cabo investigaciones independientes.
La reforma surge como respuesta a un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que, en abril del año pasado, ordenó que el mando de la GN se separara del Ejército y pasara a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
La iniciativa actual busca no solo revertir esta decisión sino también abordar los desafíos planteados por el crimen organizado, que desde 2007 ha tenido un impacto profundo en la sociedad mexicana.