El presidente Andrés Manuel López Obrador ha denunciado un intento de extorsión por parte de Televisa hacia Rocío Nahle, gobernadora electa de Veracruz, durante su campaña electoral.
Durante su conferencia matutina, López Obrador acusó a Televisa de exigir 200 millones de pesos a Nahle a cambio de silenciar detalles sobre la refinería Dos Bocas en Tabasco, proyecto que supervisó como secretaria de Energía. Al negarse a pagar, Televisa habría lanzado una campaña difamatoria contra ella.
UNA GUERRA EMPRENDIDA POR MEDIOS
El presidente también criticó a El Universal por participar en lo que describió como ataques coordinados contra Nahle, contribuyendo a la percepción de que el partido Morena podría perder en Veracruz Así lo informó el presidente:
Grupos conservadores y empresarios fueron engañados con encuestas manipuladas y defraudados financieramente.
Ante acusaciones de corrupción y enriquecimiento ilícito, Rocío Nahle y su esposo, José Luis Peña, han rechazado las afirmaciones. Nahle ha defendido su integridad, destacando su transparencia patrimonial y la validación de sus ingresos por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Este incidente resalta la tensión entre políticos y medios de comunicación en el contexto electoral. La situación pone de manifiesto la importancia de la ética periodística y la responsabilidad de los medios en la construcción de la narrativa política.