En un acto que ha desatado indignación y críticas generalizadas, veinte regidores del municipio de Mineral de la Reforma han decidido otorgarse un polémico «Bono de Retiro» por la suma de 300 mil pesos cada uno, justo antes de concluir su mandato.
Esta medida, que ha sido propuesta y apoyada mayoritariamente por los miembros del cuerpo edilicio, incluyendo al alcalde en funciones Fernando Escalante Sánchez, podría resultar en una erogación total de seis millones 600 mil pesos para las finanzas públicas municipales.
El alcalde, quien ha manifestado su oposición pública a la iniciativa, se encuentra en una posición minoritaria frente al cabildo, donde las decisiones se toman por mayoría.
Esta compensación, que no ha sido consultada con la ciudadanía, ha sido duramente criticada por representar un abuso flagrante del poder y un saqueo a las arcas municipales.
Entre los nombres de los regidores que impulsan este bono se encuentran Jair García Reyes, Abril Ortiz Díaz, Enrique Ángeles Reyes y Francisco Javier Vargas Pacheco del PRI; Germán Montealegre Salvador de Morena; Dulce Ma. Sánchez Martínez de Nueva Alianza; y Luis Enrique Baños Gomez del PAN.
Este grupo diverso de representantes políticos ha generado una reacción de repudio por parte de los ciudadanos, quienes ven en esta acción una muestra clara de desdén hacia las necesidades y opiniones del pueblo.
El caso ha resaltado la división dentro del cabildo y ha puesto en tela de juicio la integridad de los funcionarios públicos involucrados, especialmente en un contexto donde los resultados de su gestión han sido cuestionables para la comunidad.
Este escándalo no solo afecta la confianza en las instituciones locales, sino que también proyecta una imagen de avaricia y desapego de los líderes políticos hacia los intereses de quienes representan.
La situación, además, ha sido exacerbada por el contexto político reciente en Hidalgo, donde movimientos electorales han dejado al descubierto una profunda desconexión entre los partidos políticos tradicionales y la ciudadanía.
En resumen, el cuestionable manejo de recursos públicos en Mineral de la Reforma ha generado una ola de críticas y llamados a la rendición de cuentas por parte de los afectados directos: los contribuyentes.