En un incidente aéreo sin precedentes, el vuelo SQ321 de Singapore Airlines, en ruta de Londres a Singapur, enfrentó turbulencia extrema. El suceso, que tuvo lugar tras 10 horas de vuelo, provocó una tragedia: la pérdida de una vida y múltiples heridos.
El Boeing 777-300ER, con 211 pasajeros y 18 tripulantes, experimentó una turbulencia de aire claro, un fenómeno impredecible y peligroso que se manifiesta en cielos despejados. La caída abrupta de 37,000 a 31,000 pies en solo tres minutos resultó en una emergencia médica, obligando al piloto a desviar el avión al aeropuerto Suvarnabhumi en Bangkok.
La víctima fatal, un ciudadano británico de 73 años, y los siete pasajeros en estado crítico. Este incidente ha puesto de manifiesto la necesidad de revisar los protocolos de seguridad aérea.
Singapore Airlines, junto con las autoridades de aviación, están llevando a cabo una investigación exhaustiva. Expertos en la materia señalan que incidentes como este podrían incrementarse debido al cambio climático. La comunidad aérea internacional se encuentra en estado de alerta, buscando fortalecer las medidas de seguridad para proteger a los pasajeros de futuras turbulencias.
¿QUÉ SON LAS TURBULENCIAS
Las turbulencias aéreas son movimientos bruscos e impredecibles del aire que pueden afectar la estabilidad de un avión durante el vuelo. Estas pueden ser causadas por una variedad de factores, incluyendo cambios en la temperatura, la presión atmosférica, las corrientes de aire como las corrientes en chorro, el aire alrededor de las montañas, y las tormentas eléctricas.
Existen diferentes tipos de turbulencia, clasificados según su intensidad:
- Ligera: Puede causar una ligera tensión en el cinturón de seguridad y mover objetos no asegurados.
- Moderada: Puede hacer que los pasajeros sientan movimientos más fuertes y los objetos no asegurados se desplacen con mayor intensidad.
- Severa: Puede resultar en que los pasajeros sean lanzados contra el techo si no llevan puesto el cinturón de seguridad.
- Extrema: Es muy rara, pero puede causar lesiones graves o incluso la muerte.
La turbulencia de aire claro es particularmente peligrosa porque ocurre en cielos despejados y no puede ser detectada con anticipación por el radar meteorológico. Se produce principalmente dentro o cerca de las corrientes en chorro y puede surgir cuando dos grandes masas de aire cercanas se mueven a distintas velocidades.
Aunque las turbulencias son comunes y la mayoría de los vuelos las experimentan sin incidentes graves, es importante siempre seguir las instrucciones de la tripulación y mantener abrochado el cinturón de seguridad durante todo el vuelo para minimizar el riesgo de lesiones.