En un ejercicio democrático sin precedentes, la comunidad estudiantil de Puebla participó en un simulacro electoral universitario el pasado 7 de mayo, con miras a las elecciones del 2 de junio de 2024
La semana pasada se llevó a cabo el Simulacro Electoral Universitario 2024 (SEU 2024) a nivel nacional con la participación de 480 planteles y más de 250 mil estudiantes a través del Consejo Electoral Universitario, al que se sumaron diversas facultades y preparatorias de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
La actividad, que involucró a 60 colegios, facultades y tecnológicos, reflejó el interés y compromiso de los jóvenes con el futuro político de México.
La candidata de Morena, Claudia Sheinbaum, obtuvo una mayoría abrumadora con el 65% de los votos, seguida por Jorge Álvarez Máynez de Movimiento Ciudadano con el 22.2%, y Xóchitl Gálvez con el 7.7%. Este resultado anticipa un posible escenario para las próximas elecciones, donde la juventud podría jugar un papel decisivo.
Abril Juárez, vocera del simulacro, destacó la importancia de estos ejercicios para fortalecer la democracia y la participación ciudadana.
La juventud está interesada y participativa, lo que podría traducirse en una mayor afluencia en las urnas este 2 de junio.
El simulacro, que contó con la participación de 16,472 estudiantes, no solo sirvió para medir las preferencias políticas, sino también para fomentar la conciencia cívica entre los futuros votantes del país. Con iniciativas como esta, Puebla se posiciona como un estado líder en la promoción de la participación electoral juvenil.
EL PAPEL DE LOS JÓVENES EN LAS PRÓXIMAS ELECCIONES
la juventud emerge como un pilar fundamental, frente a la desconfianza y el desencanto político, se anticipa que un impresionante 81.6% de los jóvenes ejercerá su derecho al voto el 2 de junio. Con una cifra estimada de 26.2 millones de votantes jóvenes, entre 18 y 29 años, inscritos en la lista nominal, su influencia es potencialmente transformadora para el destino nacional.
Distanciados de la política tradicional, estos jóvenes anhelan líderes íntegros y medidas prácticas que beneficien a la sociedad. Poseen, sin duda, la capacidad de forjar el porvenir de México con sus decisiones y su activismo cívico.
