El gigante tecnológico y la administración Biden anuncian un proyecto que promete transformar el panorama económico y tecnológico del estado
Microsoft ha anunciado una inversión colosal de 3.300 millones de dólares para el desarrollo de un centro de datos de inteligencia artificial en el corazón de Wisconsin. Este proyecto, que se despliega en colaboración con la administración del presidente Joe Biden, no solo simboliza un avance significativo en la infraestructura tecnológica del país, sino que también representa un compromiso firme con la creación de empleo y la educación en la región.
Joe Biden mocked Donald Trump today in Wisconsin while highlighting a new Microsoft center to be built where Trump once promised a $10 billion Foxconn factory that never happened.
He “didn’t build a damn thing,” Biden said. https://t.co/at3RLoWYsA pic.twitter.com/bEcpB5cMpq
— POLITICO (@politico) May 8, 2024
La inversión, que se extenderá hasta finales de 2026, contempla la construcción de un centro de datos físico y la creación de una academia en asociación con el Gateway Technical College.
Esta academia se dedicará a formar y certificar a más de 1.000 estudiantes en cinco años, preparándolos para trabajar en el nuevo centro de datos y en los empleos del sector informático que surgirán en la zona.
El presidente Biden ha destacado este proyecto durante su visita a Wisconsin, subrayando el potencial de la inversión para generar aproximadamente 2.300 puestos de trabajo sindicados en la construcción y 2.000 empleos permanentes una vez finalizado el centro. Además, Microsoft se ha comprometido a ofrecer oportunidades de capacitación en la economía digital a miles de habitantes de Wisconsin.
Este anuncio es particularmente significativo, ya que se realiza en el mismo lugar donde se frustró una inversión previa de 10.000 millones de dólares de la empresa taiwanesa Foxconn, anunciada durante la administración de Donald Trump. La nueva inversión de Microsoft no solo busca rectificar las promesas incumplidas del pasado, sino que también se presenta como un símbolo de esperanza y progreso para el futuro de Wisconsin y de toda la nación.
El futuro centro de datos promete ser un catalizador para la innovación y el crecimiento laboral, posicionando al estado como un referente en la industria tecnológica global.