México considera que estos ataques contra la población civil constituyen una grave violación del derecho internacional humanitario y podrían tener consecuencias catastróficas para miles de civiles en la región.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) expresó su profunda preocupación por la situación y realizó un llamado urgente a un cese al fuego humanitario inmediato, instando a todas las partes involucradas en el conflicto a buscar una solución pacífica y definitiva.
El Ejército de Israel confirmó haber tomado el control del lado gazatí del cruce de Rafah con tanques, tras una noche de bombardeos en la zona oriental de la ciudad.
Este trágico suceso ocurre mientras se cumplen siete meses desde el inicio de la guerra en Gaza, con un saldo actual de 34,789 fallecidos y 78,204 heridos.
COMUNICADO. “México condena el ataque de Israel a la ciudad de Rafah y hace un llamado al cese al fuego inmediato”.
El Gobierno de México condena la ofensiva militar de las fuerzas armadas de Israel contra la ciudad de Rafah y externa su profunda preocupación por las… pic.twitter.com/DdN5koiEvE
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) May 7, 2024
La comunidad internacional, incluyendo al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, la Unión Europea (UE) y varios países latinoamericanos como Brasil, han condenado este acto de violencia.
México también ha exigido que la ayuda humanitaria llegue sin contratiempos a toda la Franja de Gaza, con el fin de atender urgentemente a la mayor cantidad posible de personas y evitar una mayor agudización de la tragedia humanitaria.
La SRE ha reiterado su compromiso de seguir abogando en el ámbito multilateral, especialmente en el sistema de Naciones Unidas, por la solución de los dos Estados como la única solución estructural para resolver el conflicto palestino-israelí.
A diferencia de algunos gobiernos de la izquierda latinoamericana, como Brasil, Bolivia, Colombia y Chile, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mantenido una postura neutral ante el conflicto y ha descartado romper relaciones con Israel.