Episcopado Mexicano pide no especular sobre el caso de Salvador Rangel

La Conferencia del Episcopado, a través de la voz de Monseñor Ramón Castro Castro, busca esclarecer los hechos y restablecer la verdad ante una sociedad mexicana cada vez más polarizada

 

Monseñor Ramón Castro Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) afirmó que se han hecho conjeturas a la ligera, a través de un mensaje publicado por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y durante una ceremonia religiosa, monseñor Ramón Castro Castro, obispo de Cuernavaca, dijo que el caso del obispo emérito de Chilpancingo, Salvador Rangel Mendoza, está siendo usado para dañar a la Iglesia.

 

Para ello, apuntó el también secretario general del CEM, se han usado miles de bots para afectar la autoridad moral que tiene esta institución, de tal forma que la desaparición y el posterior hallazgo de Rangel Mendoza se convirtió en un instrumento político.

 

Ha sido tomado como un instrumento político; miles de bots, personas interesadas en dañar la autoridad moral de la Iglesia, que por gracia de Dios ha retomado fuerza, han visto la oportunidad miles, es una fábrica de bots de ‘ya saben quién’; está atacando a la Iglesia y dijeron:

 

Vamos a aprovechar este momento y vamos a darle con todo’, para que la iglesia pierda su autoridad moral.

 

 

Apuntó que no se ha respetado la dignidad del obispo Salvador Rangel y que tampoco hay derecho de réplica; por lo que hizo un llamado a quienes llevan la investigación a conducirse con objetividad y respeto, así como profesionalismo, apegado a la ley y a la ética.

 

Monseñor Ramón Castro compartió que el fiscal de Morelos, Uriel Carmona, le habría dicho que existen todos los elementos para hablar de que fue un secuestro exprés, y al cuestionarlo sobre las pruebas, el funcionario le dijo: Tengo todos los videos.

 

Finalmente, dijo que en la Iglesia no se tapa a nadie y si el obispo emérito hubiera cometido algún acto que violase el derecho canónico, se aplicará el castigo que merece, porque jamás la Iglesia va a ocultar la verdad, la verdad nos hará libres.