Por José García Sánchez
X: @Josangasa3
Quienes atentan contra la libertad de expresión son los integrantes de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) que impide, sin razones de peso, que todos los mexicanos tengan internet como un derecho.
Se coarta la libertad de instrucción, alternativas de conocimiento, y la posibilidad de que haya información real, sin tendencias, ni Fake News. Esta última es, políticamente, la razón más importante de Andrea Marvan Saltiel, comisionada presidenta y sus seis comisionados pirrurris.
La desesperada lucha de los medios convencionales por sobrevivir sin dinero del gobierno ven en los medios alternativos a sus peores competidores pero les llaman enemigos, a quienes quieren exterminar. Quemar en el Zócalo o simplemente desaparecerlos. Les han quitado el público, porque la gente busca la verdad y ellos desde su nacimiento, han mentido.
Un país sin internet es un país con pocas alternativas y mucha censura. Poca información y mucha represión. Así como donde los conservadores llaman comunistas a esos territorios, hay restricción de señales de internet, así también los miembros de la cúpula de Cofece, discriminan a quienes no tienen posibilidades de contar con un teléfono celular con señal o una computadora con ese servicio. Es decir, una fragmentación de la sociedad por causas de pobreza que es peor todavía que las que tanto critican en otros países.
El internet es un descubrimiento similar a la rueda, debe usarlo todo el que sabe utilizarlo, no sólo aquel que tenga para pagar su servicio. La visión de Cofece no sólo es discriminatoria y elitista sino mu añeja. Considera que los inventos deben usarse sólo por los nobles y dejar a los plebeyos viviendo en el pasado, cuando en realidad quienes viven en el pasado son ellos.
Sólo por proteger intereses particulares la Cofece impide que el internet sea gratis en todo el país y sólo concede este tipo de servicio gratuito a algunas comunidades aisladas, donde la señal es deficiente todo el tiempo, con o sin la autorización de la Cofece, el servicio es malo.
Más de un propietario de los medios convencionales han sido demandados, responsabilizados, satanizados los noticieros por internet. Dañan sus intereses y sus imágenes como empresarios y como medios, cuya veracidad se cae a pedazos.
La respuesta democratizadora de los medios por internet que informan la verdad, se convirtieron en los vencedores de la información en México. Para nadie es un secreto que la televisión comercial, los medios convencionales, desde portales hasta impresos mienten, lo que es peor tergiversan la realidad para golpear a la Cuarta Transformación y buscar simpatías para la oposición que tiene como objetivo convertir en n mexicanos nostálgicos del pasado.
Negar un beneficio al pueblo es vivir en una dictadura, esa que reiteradamente adjudican al gobierno actual, que quiere darle a todos los mexicanos, sin excepción, el derecho a tener internet, pro la información, la tecnología, las redes, las herramientas de información para Cofece deben quedar en manos de unos cuantos, es por eso que no pueden argumentar con solidez la prohibición de la iniciativa del Jefe del ejecutivo de darle este servicio a todos.
Los intereses de la Cofece siempre fueron de grupo, de élite, de privilegiados. Son esa parte de la administración pública que se creó para darle trabajo a los amigos y familiares de los funcionarios públicos y garantizar que tendrían trabajo, con buen sueldo por lo menos un decenio.
