El 3-0 fue demasiado una loza demasiado pesada para el equipo dirigido por Nicolás Larcamón, que si bien no dejó de intentar buscar los tres goles que necesitaba, nunca pudo ser superior al equipo lagunero, que se plantó con un buen juego defensivo, evitando cualquier sorpresa.
Fue hasta el minuto 54 que el Puebla pudo despertar e hizo explotar las tribunas del Estadio Cuauhtémoc. de la mano del goleador Santiago Ormeño, acercó a los camoteros e incendió la llama de la esperanza; sin embargo, el tiempo corría rápido, tanto que no le alcanzó al equipo de la Angelópolis.
El tanto de Ormeño hizo soñar a la afición blanquiazul que estuvo metida desde antes del juego con su equipo confiando en una posible remontada, pero Santos al final se llevó la serie haciendo un juego que no dio pie a las sorpresas y gracias al resultado del pasado jueves en el Territorio Santos Modelo.
Es así como se definió la serie de semifinales, con un Cruz Azul esperando rival. Ahora solo falta ver si el equipo capitalino logra borrar los fantasmas de siempre y no la cruzazulea una vez más frente a un equipo lagunero bien parado y con grandes jugadores.