Luego de la designación presidencial, Lenia Batres Guadarrama rindió protesta ante el Pleno del Senado como magistrada de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para el periodo 2023-2039, propuso que la Corte sea austera y que los ciudadanos elijan a los ministros.
Cabe mencionar que Batres Guadarrama, se suma a los ministros Juan Luis González Alcántara Carrancá, Margarita Ríos Farjat, Yasmín Esquivel Mossa y Loretta Ortiz Ahlf que fueron designados por el Ejecutivo Federal en los últimos cinco años.
A manera de carta de presentación y frente a los señalamientos de la oposición de ser ministra “aliada” de la Cuarta Transformación, resaltó: “No tengo conflicto de interés que pudieran poner en duda la independencia, autonomía y la imparcialidad para resolver las controversias concretas”.
En su proyecto laboral la ahora exconsejera adjunta de Legislación y Estudios Normativos de la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal, Lenia Batres, aclaró que se necesita de un Poder Judicial celoso de su función, de guardián constitucional, sin invadir la esfera de facultades de los otros poderes.
PROYECTOS DE BATRES
“No corresponde al Poder Judicial nombrar o distribuir gobernadores, impedir la distribución de libros de texto gratuito, invalidar leyes cuando no está en duda la inconstitucionalidad de los actos”
Resaltó la necesidad de reencauzar la actuación del Poder Judicial hacia el límite constitucional y legal, pues en su opinión, dijo, invade otros poderes.
“Por eso, en el caso mexicano nos corresponde re-encauzar la actuación del Poder Judicial hacia el límite constitucional y legal. Es una necesidad republicana y democrática… el Poder Judicial, creo, invade doblemente la facultad del Poder Legislativo y me parece que viola el artículo 49 constitucional”
Asimismo, Batres consideró que ya es tiempo de que la Suprema Corte y demás órganos del Poder Judicial adopten una actuación austera, que cumplan con su obligación de impartir justicia pronta y expedita.
Detalló que asuman que la función judicial no es patrimonio de los jueces, ni parte de una carrera escalonaría, sino servicio público para la sociedad.