El gobernador de Texas, Greg Abbott, fue nombrado en una demanda presentada por el Departamento de Justicia el lunes.
La demanda solicita que el gobierno del estado de Texas elimine una serie de boyas naranjas de 1,000 pies de altura que, según el gobierno federal, representan un riesgo ambiental y humanitario. Además, según la denuncia, Texas erigió ilegalmente barreras cerca de Eagle Pass sin las autorizaciones requeridas.
La instalación de las boyas es el paso más reciente en una operación de seguridad fronteriza en Texas que también involucró la instalación de alambre de púas, la detención de inmigrantes por cargos de allanamiento y el envío de solicitantes de asilo a ciudades en otros estados controlados por los demócratas.
En respuesta a la demanda, Abbott escribió el lunes una carta al presidente Joe Biden defendiendo el derecho de Texas a erigir el muro. Afirmó que el presidente estaba poniendo en riesgo a los migrantes al no hacer más para disuadirlos de viajar a la frontera de Estados Unidos.
El 21 de julio, el Departamento de Justicia de EE. UU. advirtió a Texas que su muro flotante, que daña las boyas de bola en el Río Grande, era ilegal según la ley federal y planteó problemas para los trabajadores migrantes que ingresan a los EE. UU. UU. desde México. En una carta fechada el jueves obtenida por The Associated Press, la administración de Joe Biden le dijo al gobernador republicano Greg Abbott que la barrera construida este mes cerca de la ciudad fronteriza de Eagle Pass en Texas es «ilegal».
El gobierno afirma que hacerlo viola el Tratado de Límites de 1970 y puede provocar que el lecho del río se bloquee, lo que podría causar inundaciones graves en el lecho del río en determinadas épocas del año.
